A un menos de un mes de que el Contralor de la República Genaro Matute deje el cargo, tras siete años de estar al frente de esta entidad, el Ejecutivo no ha dado a conocer el nombre de la persona que propondrá para que lo reemplace en este puesto de vital importancia en el proceso de fortalecimiento de la institucionalidad democrática.
Al parecer el gobierno del presidente Alan García necesitaría más tiempo del reglamentario para proponer al Congreso un candidato. Según el titular del Congreso, Javier Velásquez Quesquén, García puede presentar al candidato hasta una semana antes de que Matute se aleje del cargo.
Esta situación de presunta indefinición y de total hermetismo por parte del Ejecutivo sobre los nombres que se están considerando para ser propuestos a tan importante cargo en la lucha contra la corrupción, no hace más que aumentar las dudas sobre la idoneidad de la persona que asumiría esta función.
La decisión que tome el Ejecutivo debe ser meditada cuidadosamente, sobre todo ahora que la población se encuentra consternada por el escándalo León – Quimper, que grafica claramente los altos niveles de corrupción que se estarían dando en el gobierno.
Esta situación ha incrementado la desconfianza de la población y la sensación de que este caso de corrupción no es el único que se estaría dando en el gobierno. Es por esta razón, que es más que necesario, que el Ejecutivo haga público lo más pronto posible el nombre de la persona que estará proponiendo para el cargo de Contralor General de la República, como una expresión de transparencia y apuesta, por una institución de control sólida e independiente
Debe remarcarse que, el próximo Contralor General de la República debe cumplir escrupulosamente con los requisitos y restricciones señalados en la Ley Orgánica del Sistema Nacional de Control y de la Contraloría General de la República. Así mismo, se deben considerar ciertos criterios de evaluación que apunten a la búsqueda de principios básicos como: moral, ética y óptimo desenvolvimiento técnico; en cada una de las personas propuestas para el cargo y que no mantengan ningún tipo de vínculo partidario con el gobierno o ser funcionarios del mismo.
Es necesario que, el gobierno de mensajes de voluntad política para luchar efectivamente contra la corrupción y que estos se manifiesten en la transparencia de las acciones del ejecutivo. La propuesta del próximo Contralor General de la República es una de ellas.