Instituto de Medicina Legal determinó que las nueve personas asesinadas en El Santa recibieron entre dos y cuatro tiros en la cabeza.
Publicado en El Comercio on line
El equipo forense del Instituto de Medicina Legal (IML) determinó que las nueve personas asesinadas y enterradas en fosas comunes en un arenal de la provincia de Virú, en La Libertad, recibieron entre dos y cuatro disparos en la cabeza, informó hoy el Ministerio Público.
El fiscal provincial a cargo de las investigaciones, Robert Angulo señaló que uno de restos exhumados presenta dos disparos; mientras que el resto entre tres o cuatro perforaciones en el cráneo, provocadas por armas de fuego.
Los peritos realizaron las tomas de tejido bucal y muestras sanguíneas a familiares de las víctimas del Santa, para luego cotejarlas y determinar si coinciden con las de los cuerpos exhumados.
Paralelamente, continúan los trabajos de reconocimiento físico, en los cuales las familias han confirmado que los restos hallados corresponden a sus parientes, señaló la fuente.
OTROS CUATRO CADÁVERES HAN SIDO HALLADOS
Angulo informó que los otros cuatro cadáveres hallados a unos dos kilómetros de las tres fosas donde se encontraron los primeros nueve, camino al sector de Puerto Perdido, en el distrito de Guadalupito, están bajo la custodia de su dependencia e iniciarán los estudios cuando acaben con el primer caso.
“Estamos abocados a la identificación de los primeros nueve cuerpos y el estudio de los otros se realizará posteriormente. Por lo pronto, no podemos dar mayor información sobre el último hallazgo”, puntualizó.
Peritos forenses exhumaron el fin de semana nueve restos humanos en el sector de Huaca Corral, en la provincia liberteña de Virú, que podrían corresponder a los campesinos del Santa secuestrados por el grupo Colina en 1992.
RESTOS PODRÍAN CONFIRMAR POLÍTICA DE GUERRA CLANDESTINA
El fiscal de la Nación, José Peláez considera que los restos del Santa podrían confirmar la política de guerra clandestina por parte del régimen del expresidente Alberto Fujimori.
“Esto (la identificación de los cadáveres) hay que confrontarlo (también) con las versiones que dieron los miembros del grupo Colina que se acogieron a la colaboración eficaz y que dijeron que en esa zona habían restos y se estaría confirmando que esa sería una de las actuaciones en base a la política de guerra clandestina que se aplicó durante el régimen de Alberto Fujimori”, sostuvo.