La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH) condena el aleve atentado terrorista producido ayer en el distrito de Tintay Puncu, en Huancavelica, que dejó como terrible saldo la lamentable pérdida de doce efectivos militares y siete civiles, así como varios heridos, entre ellos mujeres y niños.

Expresamos nuestra solidaridad con las víctimas y familiares de los efectivos de las Fuerzas Armadas quienes, en el cumplimiento de su deber, vieron agredidos sus derechos a la vida y a la integridad; así como nuestra solidaridad con las víctimas civiles y sus familias.

La CNDDHH invoca a las autoridades realizar las investigaciones necesarias a fin de identificar a los responsables de estos repudiables hechos que atentan contra la paz y reconciliación entre los peruanos, intentando revivir una alternativa violentista que ha sido rotundamente repudiada por los peruanos.

Del mismo modo, exhortamos al Gobierno a implementar una política integral con el fin de erradicar la violencia en las zonas donde conviven el narcotráfico y la subversión, garantizando al mismo tiempo el irrestricto respeto a los derechos humanos de los campesinos y las comunidades nativas aledañas a las zonas de acción subversiva, que hace mucho hicieron un claro deslinde con el accionar de Sendero Luminoso y su política de terror.