La Justicia argentina dictará hoy sentencia en el juicio por el incendio del local bailable Cromañón durante un recital de rock, el 30 de diciembre de 2004, que dejó como trágico saldo la muerte de 194 personas, en su mayoría jóvenes. La fiscalía solicitó una condena de 23 años de prisión para el organizador del concierto, el empresario Omar Chabán, y de 15 años para los ocho integrantes de la banda de rock Callejeros, un grupo nacido en los suburbios de Buenos Aires, que empezaba a tocar esa noche cuando empezó el fuego, y cuya actuación generó una gran adhesión de sus fans. Chabán, un excéntrico empresario de la noche porteña, artista y promotor de grupos de rock and roll, estuvo detenido más de dos años y se ha defendido con el argumento de que no falló la seguridad sino que hubo intención criminal en los que iniciaron las llamas.
El empresario y los músicos están imputados por el delito de “estrago doloso seguido de muerte y cohecho”, al igual que Raúl Villarreal, ex mano derecha de Chabán, y dos jefes policiales, sobre un total de 15 enjuiciados que tiene esta causa que tiene su simil en Paraguay, con el caso Ycuá Bolaños, que recientemente culminó con la prisión de los principales acusados, y en Perú con el caso de la discoteca Utopía.