Por CooperAcción.- Los cuestionamientos al proyecto Majes Siguas II han llegado a un punto crítico con el paro decretado en la provincia de Espinar en el Cusco. Esta situación se veía venir, luego que en la primera semana de junio el gobierno selló su apoyo al proyecto sin mayor respaldo técnico.

Pese a todo, el gobierno ha continuado con el cronograma previsto y el 13 de septiembre (adelantándose dos días a la fecha prevista) entregó en Lima la buena pro al consorcio Angostura Siguas, conformado por las empresas españolas Cobra Instalaciones,  Servicios de España y COSAPI del Perú. La inversión total comprometida asciende a US$ 450 millones, aunque los ganadores solo aportarán US$ 250 millones.

Cabe señalar que en torno al proyecto Majes Sihuas II, existe una sentencia del poder judicial que se estaría incumpliendo. La sentencia señala que primero se debe realizar el Estudio de Impacto Ambiental y el Estudio de Balance Hídrico. Además, ambos estudios deben concluir con audiencias públicas, conforme lo señalan las normas ambientales del país.

Medios de prensa han informado que otra sentencia del juzgado cusqueño de Wanchaq, había ordenado que se paralice la licitación. ¿Por eso se adelantó la entrega de la buena pro?

¿Qué significa Majes Siguas II?

El proyecto comprende  represar  las  aguas  del  río Apurímac (en la confluencia del río Apurímac  y  Hornillos,  en  la región  Arequipa),   para   la   irrigación  de  hasta   60,000 hectáreas de nuevas tierras en las pampas de Majes.

Desde   Cusco   se    señala  que  con el represamiento de las  aguas  del  río Apurímac se agravará la disminución  del   caudal  de  los  ríos  que  abastecen  la  zona, poniendo en riesgo más de 60 proyectos de riego  y el suministro de agua potable de  la   población   de Espinar.

Hasta  el   momento  no   se   ha   culminado   el    Estudio   de  Impacto  Ambiental   ni  el Balance Hídrico.  Cusco  rechaza  que  se haya otorgado la  buena  pro del  proyecto sin tener el  estudio de afianzamiento hídrico de Espinar.

El gobierno señala que todo el problema se debe a la desinformación que campea en Espinar. Si fuese cierto habría que preguntar por qué no han podido, en todo este tiempo, brindar la información necesaria.

Lo real es que el proyecto Majes Sihuas II carece de una visión de cuenca. Es urgente que se instale el Consejo de Cuenca del río Apurimac (parte alta y baja del río Apurímac). Este Consejo debería tener como primera tarea una evaluación externa del proyecto, tal como se señala en la Ley de Recursos Hídricos (Ley Nº 29338) y en su Reglamento (D.S. Nº  001-2010-AG).

Majes Sihuas II representa un conflicto que cada vez será más frecuente en el país. Como se sabe en el Perú podría presentarse muy pronto una situación de estrés hídrico, si es que no se toman un conjunto de medidas correctivas.

Esperamos que estos aspectos sean adecuadamente atendidos y que la situación de tensión que se vive en Espinar encuentre el camino del diálogo.