En carta al ministro de Justicia, la CNDDHH señala que el retiro parcial de la competencia contenciosa de la Corte Interamericana de Derechos Humanos por parte del Estado peruano -tal como lo ha planteado el primer ministro Javier Velasquez Quesquén-, resultaría inadmisible, inviable, antidemocrática y contraria a los derechos humanos. La CNDDHH recuerda que esta posiblidad no está contemplada ni permitida por la Convención Americana de Derechos Humanos, ratificada por el Perú en 1978.